Emprendedor convierte restos de café en tazas, vasos y ¡hasta relojes!
Una de las cosas más reutilizadas en el mundo por las personas son los posos de café. Estos desechos resultan ser muy buenos para darle vida a los jardines. Sin embargo, Julian Nachtigall-Lechner les ha encontrado otro uso aún más creativo y circular.
Tazas resistentes hechas con café
Julian Nachtigall-Lechner es un diseñador de productos que le fascina crear cosas nuevas y duraderas a partir de ciertos residuos, y la idea de hacer algo nuevo con los desechos del café lo atrapó desde el comienzo. Fue en el año 2015, cuando este emprendedor encontró una fórmula que le permite usar los posos de café para varias aplicaciones.
Julian es el emprendedor detrás de Kaffeeform, una marca dedicada a transformar restos de café en asombrosos productos como, por ejemplo, tazas. Para hacerlo posible, este emprendedor recoge los desechos de café molido de varias cafeterías y restaurantes en Berlín.
Las tazas de Kaffeeform son capaces de mantener las bebidas calientes y pueden resistir caídas de hasta un metro y medio. Están hechas para durar varios años y pueden lavarse sin ningún tipo de problemas.
Pero Julian no se ha quedado solo en las tazas, pues el objetivo de Kaffeeform es extender su portafolio y seguir creando productos a partir de desechos de café, por lo que recientemente ha lanzado una línea de vasos y hasta una colección de relojes.
